Los humedales para el tratamiento de fangos (STW por sus siglas en inglés) se proponen como una alternativa tecnológica para la gestión de sólidos en depuración. El sistema reduce los costes de operación y mantenimiento frente a las tecnologías convencionales; presenta un menor requerimiento energético y mayor simplicidad técnica. Estos humedales funcionan con un tiempo de retención suficiente para el secado y la mineralización progresiva de los fangos, generando un producto de alto valor, que puede ser empleado como biofertilizante. 

Mientras que estos humedales normalmente reciben fango secundario, la innovación de esta tecnología en el proyecto LIFE INTEXT será la introducción de fango anaeróbico. Se espera conseguir un contenido final de sólidos de 30% de secado y mineralización, partiendo del 1% inicial, reduciendo 30 veces las necesidades de transporte.

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